XXI
Hay de aquel que use la mascara de la mentira y no soporte su calor, puede que se asfixié, puede que no la resista, el que la usa debe saber cuales serán sus beneficios y consecuencias, debe conocer sus limites y estar consciente que no siempre lograra cubrir todo, algunas veces nos dejara en evidencia. La mentira no es un arma para todas las personas, requiere de inteligencia pero a la vez de ignorancia, requiere de astucia, pero a la vez de torpeza, el fascinado a mentir debe conocer también la verdad, debe saber a lo que se enfrenta. La mentira no es un placer general requiere de dotes artísticos y en la vida no todos somos artistas, algunos desempeñamos otras actividades dentro de este teatro.
XXII
A veces he despertado y hubiese querido ser de los ciegos de este mundo, de aquellos que tienen los oídos sordos, que viven el día a día sin ninguna miserable preocupación, pero... después pienso que no soportaría este tipo de vida, no soportaría vivir sin curiosidad, sumergido en la gris monotonía, sin tener valor de cruzar los limites, sin haber aprendido a levantarme por si solo, sin haber vivido de mis propias experiencias no limitándome a las de los demás, como os he dicho antes es mejor ver, ver mas allá de lo que algunos se limitan a ver, de tener el oído agudo para escuchar lo que sea, de tener nuestros propios pensamientos, nuestra propia esencia, pero... también tenemos derecho a sentirnos inconformes de vez en cuando, de renegar de nuestras virtudes para terminar siempre agradeciéndolas y no deseándolas.
XXIII
XXIV
Debemos de admirar las virtudes y dotes que nosotros poseemos, pero también mirar de reojo las de los demás y aprender, no a imitarlas, si no aprenderlas y mejorarlas para así individualizarlas y volverlas nuestras. Todos nosotros, seres humanos estamos dotados de muchas virtudes, lo único malo es que algunos o muchos de nosotros nos vamos de este mundo sin haberlas encontrado y en la mayoría de los casos sin poderlas explotar aunque sepamos de su existencia.
XXV
Vuelvo otra vez a tocar las limitaciones, no sé en que momento perdimos nuestra libertad y con nuestra autorización, no sé en que momento nos dejamos pervertir la mente por ideas estúpidas de otros que lo único que buscan es la limitación mental de las sociedades para saciar su apetito de poder y dominio, debemos emerger de entre las sombras, los que nos dejamos limitar por apariencia o dicho de mejor forma por conveniencia, temblarían los glotones si emergiéramos a la luz y guiáramos a los que se encuentran ciegos, idiotizados y mutilados de su pensamiento y libertad de acción, por que esa también es una virtud, un derecho que no debemos de entregar a nadie por que nos pertenece.
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